pero acepté con esperanza la tarea.
Al andar por el universo escuchando
clamores
de todas las índoles,
Aprendí a camuflarme con ropas de
luto,
para retardar la puñalada.
Entre íres y veníres,
Asumí mi misión.
Vislumbré juegos de poder
Y... después de vencer el miedo,
acepté rasgar con plumas
mi parte de la tajada.
Aprendí a rugir.
Mis voces ahora llegan incluso
donde supuestamente antes había nada.
Tallé mis culpas, las convertí en
cristales.
Esculpí mis errores, los trasformé en
faro.
Se acercan soles y lunas de paz.
Siendo el que ahora soy
Podré amar y acercarme
A esos a quienes les corresponde
Continuar con la tarea.
Tito Valbuena.
En ese camino aprendí a improvisar.
Aprendí a mirar a los ojos de la luna
y a hacer poesía de la nada.
Ensayé mis improvisaciones
Le puse música a todos nuestros
bailes.
Incluso la de mi voz.
Escribí en cada célula del universo:
“Esta es la época de reír.”
El payaso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario